Recuerdo de Luis Mercado une a familias en emotiva jornada
En el mismo lugar donde falleció el 20 de septiembre de 1984 mientras practicaba fútbol, se destacó sus cualidades en una homilía y sus hijas hacen un sentido homenaje a su entrega.
Es medio día del 20 de septiembre de 2018 en el sector de El Llano de Las Compañías y tres hermanas efectúan diferentes tareas en una tumba que nunca le han faltado las flores. En medio de la animita existen dos mástiles donde flamean las banderas de Chile y el Club Peñarol. Pero, no es el único movimiento, alrededor se reparten el resto de sus familiares con diversas acciones que dan vida a un ritual que han desarrollado durante 34 años. En esta oportunidad no fue la excepción.
La familia Mercado Gálvez nuevamente llegó hasta este lugar para recordar la muerte de Luis Mercado Sepúlveda, quien murió un 20 de septiembre de 1984 a la edad de 33 años mientras jugaba fútbol junto a sus amigos y familiares La pérdida fue sentida. Sobre todo por sus hijas. Es por ello que verlas arreglar la tumba de su progenitor conmueve. A pesar que han pasado más de tres décadas, confiesan que el cariño y el recuerdo están intactos.
En medio de los preparativos de la misa que se efectuó en el mismo lugar que con el tiempo se ha convertido en una lugar de veneración, las tres relatan a Periodico La Compania.cl como han sobrellevado el dolor. “Para nosotros como hija siempre ha estado presente y nunca hemos sentido que se ha ido. En cualquier ocasión le pedimos y él está. La verdad es que me emociono”, confiesa Sandra, quien tenía 8 ochos cuando se produjo el deceso. Susana 14 y Jésica 13. Agrega que su padre se había transformado en un ejemplo de persona. “Era un ángel que se las arregló para dejar a una familia bien constituida. Nunca un maltrato con nosotros, a todas nos apoyaba y favorecía”.
Una de las hermanas recuerda la anécdota cuando no cumplió la orden de su padre de limpiarle unos bototos. “Se los tiré por allá y no lo hice y ese día le había dado dinero a mi madre para que nos comprara a las tres botas, pero ninguna tuvimos el calzado, todas castigadas”.
PROTECCIÓN DESDE EL CIELO
Horas antes de la tragedia Luis tuvo un diálogo con el padre de su esposa y le pasó su reloj. Pero, a la vez le pidió que la cuidara junto a sus hijas. “Él como que sabía que se iba. Es por eso que cada año venimos acá a recordarlo y todas las semanas lo vamos a ver al cementerio”. Con la misma unión apoyan a su madre Susana. “Ella la ha luchado mucho, con mucho esfuerzo nos ha sacado adelante. Siempre nos contó que fue un excelente hombre y muy preocupado de ella y nosotros éramos sus ojos y no quería que nada nos pasara”, recuerdan a coro .
TRADICIÓN INTACTA
Durante la homilía su hermano Iván recordó que Luis, había nacido entre el canto de las bandurrias del río Huasco, “creció entre potreros y todo el vergel que Dios colocó en su lugar. Una pelota de trapo y una camiseta de fútbol fueron sus eternos compañeros de juegos”. De la misma forma rememoró cómo ancló en La Serena y conforma una familia ejemplar. “Aquí conocerá el amor de su vida con quien se casa y recibe como bendición de su amor a 3 hermosas hijas”.
En la tarde se efectuó un almuerzo familiar y una jornada de juegos populares y un partido de fútbol como una forma de recordar a quien se esmeró por transformar este tipo de encuentros en una oportunidad para mantener unidas a las diferentes familias. Una tradición que Susana, Sandra y Jésica no están dispuestas a interrumpir.





!!!QUE HERMOSA TARDE PASÉ AYER RECIRDANDO ELANIVERSARIO DE LA PARTIDA DE MI CUÑADO. HAN PADADO 34 AÑOS Y PARECE QUE FUERA AYER.
QUE ENSEÑANZA NOS DEJA AL.VER LA UNIÓN DE SU FAMILIA..LLENA DE VALORES Y AMOR. UN BESO AL CIELO QUERIDO CUÑADO. DESCANSA EN PAZ !!!